Otra fuente de inspiración. - Cuando fui a comprar una alfombra para la bañera a la tienda de chinos, solamente era eso, una alfombrilla para la bañera. Llegué a mi casa y la coloqué en su sitio, en el fondo de la bañera. Hasta ahí todo normal. La sorpresa fue cuando salí de la bañera, después de ducharme. Me quedé mirando hacia la alfombrilla y allí estaban, dos tipos con cara de amargados observándome fíjamente. Me imaginé una conversación entre ellos: Pésimo: Tío, tienes unos bultos en la cara. Siniestro: Tío, tú también. Pésimo: ¿Quéeee? Seguro que es grave... Siniestro: Síiiiii, vamos a moriiiiiiiirrr. Pésimo: Oye, somos pies, son nuestros dedos. Siniestro: Ah, sí, es verdad. Pésimo: ... Siniestro: ... Los nombres me vinieron a la cabeza sin más. Dos tipos pesimistas no pueden tener nombres normales como Antonio ni Benigno, tenían que ser dos nombres descriptivos de su cara de amargado. Estos son: Básicamente, me he limitado a dibujar
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